Mi planta de naranja lima
Jose Mauro de Vasconcellos.
Zezé vive con su papá (quien perdio su empleo por una discusión con el gerente de la fábrica instalada en su pueblo), su mamá (de quien siente orgullo por ser «hija de indios» y quien trabaja en un telar), y sus hermanos: Jandira (la mayor) , Lalá (quien se emplea como obrera en la misma fábrica que estuviera su padre, para ayudar a la familia), Gloria (quien lo defiende de los maltratos que recibe de parte de sus padres y demás hermanos), Antonio o "Totoca" (el mayor de los varones, que siempre busca sacar ventaja en todo) y Luis (el más chico de la familia, a quien cariñosamente Zezé llama "El Rey Luis"). También está la abuela
Zezé y otros niños juegan al «murciélago», que consiste en trepar en la parte trasera de un coche y pasear gratis por la ciudad; nadie se anima a trepar en el carro de Manuel Valadares un portugués gordo de carácter fuerte. Zezé se atreve pero es sorprendido y castigado por éste. Al pasar los días Zezé, por querer coger guayabas, cae en una zanja y se corta el pie con un vidrio y es auxiliado por Gloria. Al día siguiente, cuando va al colegio es visto por Manuel y se compadece de la herida del niño, lo lleva a la farmacia y lo hace curar, ése será el inicio de una tierna amistad y el amor filial crecerá entre ambos, pero esa amistad será interrumpida por el El Mangaratiba, ferrocarril de la ciudad. Con la muerte de «Portuga», así le llamaban a Manuel, y también con la de Minguito, Zezé maduró precozmente, enfrentado al dolor de esa pérdida secreta.